En el concurso de aceites de les Terres del Ebre que se celebra estos días en Jesus han sido galardonados dos aceites de Orta de San Juan. Es un orgullo para todos los payeses que vivimos o nos ayuda a vivir el olivar en Orta.
La cosa ya no es como era, nosotros trabajamos olivos centenarios, árbloles que los plantaron nuestros antepasados, árboles que amamos; ahora ha salido otra técnica de plantación, una plantación industrial que solo busca ganar dinero a costa de arruinar a miles de agricultores, la pena es que los que trabajan esta nueva modalidad de cultivo tampoco se aran de oro, lo que aran es inundar el mercado de aceite, con un aceite de baja calidad, lleno de pesticidas, a cambio de bajar su precio un euro; el consumidor comprara porquería y el payes de toda la vida tendra que plegar.
Un pueblo rico en aceite, también es rico en olivos monumentales, tenemos el Parot y los árboles centenarios de la nueva variedad Verdal de Arnes o Penjoll de Orta.